Beneficios de comer sandía y contraindicaciones
Estamos en verano y esta es una época por excelencia para comer sandía. Bien fresquita de la nevera, supone una forma deliciosa de refrescarse. Es una fruta casi adictiva por su increíble sabor cuando está madura. Si estás preocupado por comerla en exceso, no deberías, porque apenas tiene contraindicaciones. Lo que sí destaca de la sandía son sus beneficios.
La sandía es agua enriquecida
Lo que más abunda en la sandía es el agua, así que es excelente para mantener el cuerpo correctamente hidratado. Hasta un 30% de la cantidad de agua diaria recomendada que necesitamos la obtenemos de los alimentos. Y ninguno puede igualar las características de la sandía en ese sentido.
La sandía aporta muchos nutrientes y pocas calorías
Debido a que el 90% de la sandía es agua, las personas tienden a infravalorar su contenido nutricional. Sin embargo, una porción de 300 gramos contiene aproximadamente un tercio del valor diario recomendado de vitaminas A y C, así como una cantidad modesta de potasio (9 %).
La sandía ayuda a la salud del corazón
Las personas que consumen de forma habitual sandía disponen de una mejor salud cardiovascular. Esto se debe a las cantidades de citrulina y arginina que aporta al organismo. Ambos suplementos funcionan también en la disminución de la presión arterial.
La sandía calma los dolores musculares
Comer sandía antes de un entrenamiento duro ayuda a reducir la frecuencia cardíaca de los atletas y el dolor muscular al día siguiente. Esto se debe a que la sandía es rica en un aminoácido llamado L-citrulina, que el cuerpo convierte en L-arginina, que ayuda a relajar los vasos sanguíneos y mejorar la circulación.
¿Tiene contraindicaciones comer sandía?
Una de las principales contraindicaciones de la mayoría de las frutas es que, como son naturalmente ricas en potasio, las personas con insuficiencia renal crónica no pueden abusar de ellas, ya que en estos casos se debe seguir una dieta baja en potasio.
La sandía contiene fructosa y también debe ser consumida con moderación por las personas que deben seguir una dieta que trate el síndrome del colon irritable.
A excepción de esos dos casos, solo debes evitar la sandía si te produce alergia. Está recomendada para bebés también, no afecta a los diabéticos (aunque sea dulce, tiene poco azúcar) y es excelente a cualquier hora del día. Simplemente pásate por tu Gadis a comprar las más ricas en sabor.