Especial #GadisSalud: la nectarina
Ya llevamos unos cuantos días de verano y seguro que coincidimos en que una de las mejores cosas que nos trae esta estación son las frutas de hueso como los albaricoques, las ciruelas, los paraguayos o las nectarinas. Por eso, en nuestro especial #GadisSalud de hoy, vamos a hablarte de la fruta conocida como nectarina, aunque recibe muchos otros nombres. Es perfecta para un tentempié por su aporte de agua y su bajo contenido calórico, pero, además, puede conferir un toque sorprendente a alguna de tus recetas. Es verdad que la nectarina ya lleva unas semanas en la sección de frutas y verduras de tu Supermercado Gadis, pero te adelantamos que ¡ahora llega lo mejor! Porque, aunque su recolección empieza a finales de mayo, es en julio cuando alcanza su punto de maduración óptima. ¿Quieres saber más? ¡Sigue leyendo!
¿Qué es la nectarina?
Tal vez te estás preguntando qué es exactamente una nectarina. Por dentro se parece a un melocotón, pero le falta ese tacto “aterciopelado” en el exterior. Su sabor también es diferente y podría recordar al de la ciruela. ¿Es entonces una mezcla entre ambos? Pues no. Está descartado que se trate de un híbrido. En realidad, la nectarina, llamada así por su sabor dulce que recuerda al néctar, es, en términos estrictos, una variedad de melocotón. Como lo lees, sería “la hermana calva” 😉. Esta variedad surge de forma espontánea y crece en el mismo melocotonero. De hecho, genéticamente ocurre algo curioso, ya que de una semilla de melocotón pueden salir árboles de nectarina y viceversa. En España, es conocida por distintos nombres dependiendo de la región: pelón, pavía, briñón, berisco, peladillo, ratón…
Originaria de China, Irán y Afganistán, fueron los romanos quienes la trajeron a Occidente. Tiene un color rojo intenso y su carne puede ser blanca o amarilla, adherida al hueso o suelta. Es una fruta jugosa, pero con cierta tersura. Al igual que el melocotón, su sabor es dulce con un punto ácido. En la actualidad, los cultivos más extensos de nectarina se encuentran en Asia, Estados Unidos y la cuenca mediterránea, siendo España el mayor productor de la Unión Europea. Nuestro país produce anualmente en torno a 500.000 toneladas de nectarinas (datos de 2020), de los que exporta una gran parte. Las comunidades autónomas con mayor superficie de frutas de hueso son Aragón y Cataluña.
Los beneficios de la nectarina
Además de ser una fruta refrescante y deliciosa, su aporte nutricional es alto por su contenido en vitaminas C, B6, B3, B2 y B1, así como en minerales (fósforo, potasio, magnesio, sodio, hierro, selenio, yodo y zinc). Su consumo habitual puede reportar muchos beneficios:
– Su alto contenido en fibra mejora la salud intestinal y ayuda a combatir problemas como el estreñimiento.
– Ayuda a digerir las grasas y mejora las digestiones.
– Al ser rica en potasio, ayuda a prevenir enfermedades cardiovasculares.
– Su aporte de carotenos contribuye a proteger la vista, la piel, las uñas y el cabello.
– La vitamina C, el selenio, los carotenos y el zinc actúan como antioxidantes y frenan el envejecimiento.
– El magnesio ayuda a equilibrar el sistema nervioso central y a mantener el sistema muscular.
– Ayuda a controlar la hipertensión gracias a su contenido en sodio y en potasio.
– Su contenido en vitamina C mejora la absorción de hierro y ayuda a combatir la anemia.
Cómo elegir y conservar las nectarinas
Aquí te dejamos unos consejos para escoger y conservar las nectarinas la próxima vez que vayas a tu supermercado Gadis:
– No te dejes engañar por su color a la hora de escoger qué nectarinas están más maduras. No siempre las de color más rojizo son las más dulces. ¿Cómo puedes saber cuál llevarte? Acerca la pieza a la nariz y si desprende un olorcillo dulce, ¡esa es!
– Para conservarlas, te recomendamos que las guardes en la nevera. Si las dejas fuera, se acelerará su deshidratación y su textura se hará más harinosa. Incluso con refrigeración, no suelen aguantar más de 4-5 días, así que tenlo en cuenta a la hora de calcular la cantidad que vas a comprar.
– Si te has pasado con la cantidad, ¡no te preocupes! Hay unas cuantas recetas para las que cuanto más maduras estén, mejor: mermeladas, confituras, helados… También puedes hacer conservas.
Cocina con nectarinas
El uso culinario de las nectarinas es similar al de los melocotones. Lo más habitual es utilizarlas para tartas, mermeladas, confituras, conservas en almíbar… Sin embargo, una forma deliciosa y sorprendente de incluirlas en tus menús es a la brasa porque se logra una suave caramelización de sus azúcares y resultan perfectas como acompañamiento. Hoy te proponemos una receta refrescante y saludable, ideal para esta época del año.
Receta de helado sin azúcar de nectarina
Ingredientes
– 10 nectarinas maduras
– 2 yogures naturales
– 2 cucharadas de miel u otro edulcorante natural (opcional)
Preparación
1. Pela las nectarinas, córtalas en pedazos y guárdalos en una bolsa de congelación bien cerrada.
2. Rellena una bandeja para hacer cubitos de hielo con porciones de yogur.
3. Mete la fruta y las bandejas de yogur en el congelador durante al menos un día.
4. Al cabo de un día, ya puedes comenzar la preparación. En la batidora o licuadora, incorpora la fruta y el yogur hasta que estén bien mezclados. Si quieres conseguir un resultado más dulce, es el momento de añadirle la miel u otro edulcorante como dátiles, por ejemplo.
5. Cuando todo esté picado y unificado, viértelo en un bol e introdúcelo en el congelador como mínimo media hora.
6. Para servirlo, puedes añadir frutos secos picados para aportar un toque crujiente o trozos de fruta fresca.
¿Te gustan las nectarinas? ¿Te vas a animar a probarlas a la brasa?