
¿Cuál es el mejor pan para canapés, tostas y bocadillos?
Tanto las tostas como los canapés son un bocado perfecto para acompañar cualquier comida. Este tipo de entrantes son fáciles de preparar y deliciosos además de que visten cualquier menú de una forma magnífica.
El denominador común en todas estas recetas es sin duda alguna el pan. La elección del pan perfecto para preparar tanto canapés como tostas es esencial si queremos sorprender con un plato de diez. El problema en estos casos siempre surge cuando no se compra el pan idóneo, pero no os preocupéis porque os vamos a hacer una recomendación.
En el caso de las tostas, tenemos que darnos cuenta que la denominación “tosta” nos indica que se trata de un bocado más selecto que una tostada sin más y, aunque es cierto que las tostas pueden ser un aperitivo fantástico para cualquier hora, pueden sin embargo convertirse en un plato de cierta elaboración y de una gran exquisitez para celebrar momentos especiales. Esa versatilidad es una de las características que hace de las tostas el bocado perfecto para cualquier ocasión: aperitivos, cenas informales, entrante o incluso plato único si optamos por una selección variada de ingredientes de cierta contundencia.
Si de verdad queremos disfrutar de una tosta digna de un restaurante con estrellas Michelin, tenemos que darnos cuenta que el pan tiene que ser del grosor adecuado, de corteza gruesa y miga abundante. Un pan que habremos de cortar en gruesas rebanadas de unos 2 cm para crear ‘una buena cama’ capaz de sostener todos los ingredientes de nuestra preparación que sirva para tostar y además que tenga el nivel perfecto de alvéolo en la miga.
Nada mejor que un buen pan gallego para preparar tostas
Los panes gallegos, de elaboración artesanal son perfectos para esta tarea y además son un sustento perfecto para acompasar en armonía al resto de elementos que conformen el plato.
Por otro lado, para los canapés no necesitamos un pan tan robusto. Y eso es genial porque nos permite diversificar los tipos de panes y así probar texturas, sabores e incluso colores diferentes.
Por lo general las recetas de canapés dan propuestas que son a base de pan, pero es que además de las típicas tostaditas que se pueden encontrar en el mercado para hacer canapés, podemos utilizar otros tipos de pan con el mismo objetivo, pero sorprendiendo a primera vista.
Junto al pan, otras de las bases más habituales para hacer canapés son el hojaldre, la masa quebrada, las tartaletas o las galletas saladas. Pero si nos vamos estrictamente al pan, una apuesta perfecta para destacar son los panes que incluyen en la masa ciertos toques de novedad. Pan de pipas, con aceitunas, de pasas y nueces o con orégano y tomate seco son apuestas geniales que podemos usar sin ningún tipo de reparo para hacer nuestras recetas.
Esperamos que después de ver qué panes se pueden utilizar como bases para hacer tostas canapés ampliéis las ideas con vuestras propuestas y con las tostas y los canapés que más éxito han tenido entre vuestros comensales.